martes, 17 de noviembre de 2009

Cosmovisión Juvenil

COSMOVISION

Por Freddy Quezada

INTRODUCCION.

La juventud es uno de los temas que envejece con más rapidez, como dijo en algún lado Mario Benedetti. Para hablar de ella es casi inevitable tropezarse con la referencia a los dioses que dieron a escoger a Aquiles su tipo de muerte. Le ofrecieron elegir si deseaba morir joven pero héroe o morir viejo y sin gloria. Probablemente Aquiles decidió la primera opción por la simple razón de ser un joven. Con veinte años más, Aquiles con seguridad no hubiese preferido lo mismo. Marx dijo que los griegos eran la infancia de la humanidad, pero debió decir, en realidad, aunque sólo sea porque a todo el mundo le gusta regresar a ella, que fueron la juventud, la eterna juventud.

La juventud es aquella etapa de la vida que sobreenfatiza los aspectos morales y éticos del mundo, como producto de comparar lo que dicen los adultos de lo que hacen; es la ruptura de la niñez y la asunción de un relevo generacional en el que se asumen deberes tenidos por traicionados o inconclusos bajo la condición de tener poca o ninguna responsabilidad familiar.

Por otro lado, ser joven también encierra lo que denominaremos como "la magia de la primera vez", es decir, la lectura de las relaciones sociales como aventura en libertad, como la gran posibilidad de iniciar cualquier empresa con éxito aún en las condiciones más adversas. Agotada la poesía de "sus primeras veces" y, acompañadas ya de nuevas responsabilidades familiares, empiezan a quebrar su moral en dos planos y entonces comienzan a ser adultos.

Estas nociones más bien cargadas de un fuerte acento psicológico y ontológico, ayudan para poder situarnos ante el subtema de la cosmovisión. Como a su vez este concepto es, como lo definimos en nuestro diseño, "aquel universo de valores, sentimientos, percepciones e interpretaciones de la vida que determinan los fines, los objetivos y la jerarquía de acciones en el desenvolvimiento cotidiano de los jóvenes", justamente nos brinda una entrada para construir una serie de escenarios donde la juventud como actor social hable por ella misma. Esta expresión, con todo, exige algunas advertencias. Una herramienta como la cosmovisión de la juventud, de origen filosófico y antropológico, nos obliga a aclarar que la juventud en sí misma no es libre de arrastrar los juicios de los otros actores ocultos, "ausentes del texto" como dirían los estructuralistas, es decir, de la adultez, vejez y niñez. Es decir, la juventud, si bien tiene su especificidad, no signica que al producir sus valores se encapsule con ellos y se realize a través de los mismos, sino que comparte, disruptiva o consensualmente, una cosmovisión de las otras generaciones, en especial la de los adultos y, en verdad, de toda una época. Nada mejor para ilustrar tal situación que llamar la atención sobre las dos cosmovisiones mayoritarias en nuestros tiempos: la modernidad y la postmodernidad. A su turno, sobre todo en los resultados de la encuesta, hablaremos con más propiedad de esta división. Por lo pronto, diremos algo sobre los antecedentes inmediatos de la juventud nacional.

En la revolución nicaragüense no triunfó, en términos sociales, ni el proletariado, ni el campesinado, ni la pequeña burguesía; triunfó la juventud. Así de sencillo. De alguna manera lo reconocen, aunque no tan categóricamente, algunos autores como Núñez (1983), empeñado en presentarle a su "tercera fuerza", no entendemos aún las razones, un carácter clasista; Vilas (1984), mostrando la alta participación juvenil durante la insurreción antisomocista con cifras del INSSBI del '80 y, en menor medida, Burbach (1987) comparándola con la juventud norteamericana, en especial con aquella generación que ayudó a expulsar las tropas yanquis de Vietnam.

Ninguno barajó como posibilidad, con todo, que la revolución sandinista pudo ser también una especie de tributo tardío al mayo del '68 francés; una suerte de versión ampliada del Cordobazo argentino del '19. Sin exagerar, en Nicaragua, en gran medida, todo el poder pasó al CUUN y al CEUUCA, la fracción más ilustrada de la juventud. Así bromeaba, a pesar de lo cierto, la mayoría de miembros del gabinete revolucionario, que llamaban a sus reuniones con el nombre de los máximos organismos estudiantiles universitarios de Nicaragua, célebres por las grandes batallas brindadas en contra de la dictadura somocista. Esa frescura cosmovisiva fue la que prevaleció en los primeros años de la revolución. La Campaña Nacional de Alfabetización, por ejemplo, cautivó al mundo no sólo por su método sino también por las sonrisas de sus soldados. Pero, en su conjunto, quizás a partir de la segunda mitad de la década del ochenta, la juventud nicaragüense podemos decir que sufrió, sobre todo en los últimos tiempos (SMP), las glorias del sandinismo y su nobleza está precisamente en que no puede gozar hoy con sus miserias, al verlo dividido y preparándose para despedazarse.

En las cosmovisiones actuales de la juventud nicaragüense, al menos de cara a los fenómenos públicos, han influido significativamente cuatro grandes fenómenos políticos: la desaparición de los países socialistas del este europeo, la desintegración de la URSS, la derrota del FSLN y el ethos neoliberal de los nuevos tiempos. El joven que ha sido testigo del derrumbe de los tres primeros hechos, no puede dejar de integrarlos, si la sorpresa ha terminado de ser asimilada, en la perspectiva de su "deber ser" en términos del sobreénfasis moral del que hablábamos al inicio. Sin duda, su horizonte se tiene que debilitar mucho o cerrar en algunos ángulos. Aún cuando los jóvenes en general no perciban las causales del derrumbe, ni les preocupe mucho el tipo de justificaciones que brinden aquellos que les interese mantener viva la llama de una cosmovisión de cambios, lo cierto es que en su conjunto, el impacto sobre las aspiraciones para una nueva sociedad navega en el reino de la incertidumbre y la diferencia. Si a esto le sumamos el otro factor, la hegemonía de los conceptos y métodos neoliberales, tendremos que, participa dentro de la cosmovisión juvenil con mucha ventaja otro esquema con fuertes encantos para redondear una nueva manera de ver la vida, menos heroica y trágica, sin duda, pero más confortable y competitiva.

En muchos aspectos, cuando hablamos de jóvenes postmodernos en el sentido más abajo indicado, no lo divorciamos de muchos atributos propios del liberalismo, en especial el sentido individualista y la "libertad negativa", es decir derechos amplios frente al Estado. Significa que, si por un lado puede representar una ventaja desde el punto de vista de la sociedad civil si tales libertades se reúnen alrededor de asociaciones juveniles, por el otro, se contradiría con un proyecto donde tenga cabida el Estado como sujeto esencial en los cambios, de tal modo que los escenarios, entendidos así por la cosmovisión juvenil, serían totalmente cerrados. Escenario 1: Todo. Escenario 2: Nada. En otros términos, sería algo así como elegir entre las bondades de la sociedad civil, sea la parte que le interesa al neoliberal (mercado) sea la que le importe a los revolucionarios postmodernos (movimientos sociales) o a los revocionarios modernos, el Estado como rector de la planificación social y económica. Quizás la parte de la sociedad civil que habla de los movimientos sociales, un plano del postmodernismo que no está contemplado en el concepto base que usamos para este trabajo, merezca un comentario especial que enlaze con la otra parte que seguirá a este "intermezzo". Es decir, un tercer escenario.

La juventud organizada como asociación juvenil es un movimiento social, tal como hoy se caracterizan estos fenómenos en el mundo. No ha sido muy explotada la idea, aunque algunos estudiosos, entre ellos Navas, y de manera diluida algunos dirigentes juveniles la conciban, de articular dos aspectos de un hecho contradictorio: el ocaso y decadencia de los partidos políticos como representantes de tales movimientos y el nuevo espacio que ofrece la sociedad civil para luchar por las reivindicaciones propias de los movimientos sociales, para el caso que nos ocupa del movimiento juvenil. Como gobierna un desencanto general frente a las promesas que los partidos políticos, en especial los de izquierda, ofrecen a la juventud, esta se ha replegado sobre sus propias bases nutricias y se ha visto obligada a navegar con banderas propias bajo la reevaluación de su papel en la sociedad civil, en particular el aspecto institucional para mejorar su situación como movimiento. Significa que en su reacomodo tiene que sacrificar un componente esencial del discurso partidario (la toma del poder) para darse paso a sí mismo en el atrincheramiento gramsciano de una "guerra de posiciones" que fortalezca la sociedad civil arrancando conquistas al poder del Estado. Nada mejor para ilustrarlo, por un lado, que la lucha por el 6% para las universidades, cuyo triunfo corrió a cargo exclusivamente de la fración más educada de la juventud. Y, por otro, de la preocupación de una buena parte de las organizaciones juveniles de fortalecer el Consejo Nacional de las Juventudes como foco federativo y plural para resolver los problemas de sus miembros y de su base representacional. Esta posición, por intermedia no necesariamente reaccionaria, estaría situada entre la actitud de desintegrarse como individuo frente a las fuerzas ciegas del mercado y la actitud de subordinarse adocenadamente ante quien se presenta como intérprete infalible y externo de sus propias aspiraciones.

En el otro extremo, no es despreciable el esfuerzo de algunas valoraciones de dirigentes políticos adultos y también de algunos dirigentes juveniles con conciencia de las injusticias y desigualdades del sistema, que no han abandonado el discurso revolucionario. Quizás la resistencia de estos juicios pueden explicar por qué entre los jóvenes la catástrofe de las doctrinas redentoras no ha sido evaluada tan desastrosamente como en los adultos. En nuestra encuesta se observa tal fenómeno. Aún más, Jorge Navas, en su monografía sobre la juventud sandinista, habla de la defensa por parte de la juventud de un esquema sandinista nostálgico que puede proporcionar pistas para entender la preferencia por el FSLN de parte de aquellos jóvenes que respondieron en nuestra encuesta sobre el partido de sus simpatías. Desde luego este discurso por sí mismo no puede determinar de un modo automático, ni mucho menos, la valoración no catastrófica de la juventud.

Si lo vemos desde otro punto de vista, la lógica que ahora se emplea, parte del principio de condenar el derrumbe del sistema socialista realmente existente y explicar que el socialismo correcto aún espera su realización. Esta racionalidad, cuyo eje sencillo podría sintetizarse en expresar que ha desaparecido un socialismo malo y que el bueno aguarda su materialización, mientras la garantía que se ofrece es la custodia que hacen de él los sujetos que se tienen a sí mismos, o los tienen por tales parte de su cientela política, como los más abnegados, consecuentes e inclaudicables, puede funcionar como una red protectora, o doctrina de consuelo, para aquellos jóvenes que aún siguen depositando "fe" en proyectos revolucionarios, independientemente de la magnitud u honradez de las vanguardias. Una narración así puede perfectamente ensamblarse con un horizonte, de suyo más difícil en las actuales circunstancias, con el "deber ser" juvenil, pero también iluminaría más de lo debido las coincidencias de metas para una sociedad igualitaria con la moral de una religión participativa. En las entrevistas que efectuamos, por ejemplo, un dirigente juvenil cristiano nos respondió "Que si el socialismo tiene futuro? Siempre he creído en el socialismo, a pesar que el ser humano se equivoca. Creo en la posibilidad del socialismo". Como se notará, esta ilustración tiene una lógica imperturbable, divina. Hombres malos para ideas buenas. Sin duda, si esto es cierto para un cristiano, lo que podríamos denominar la "astucia de la religión", es decir, una especie de aparición de los principios religiosos para lógicas ateas, puede también estar participando en la evaluación de la decadencia de los relatos prometeicos y acaso por eso sean considerados como simples episodios de un reflujo mundial que algún día volverá a replantear los dilemas clásicos de la revolución: cambiar o perecer.

Pero, si convenimos en que la "astucia de la religión" puede estar explicando la conducta de los jóvenes en el ámbito que hemos denominado "aspecto público", es sólo una probabilidad de baja frecuencia que este reducto revierta toda la hegemonía de la cosmovisión postmoderna, en su variante neoconservadora, para lo que denominamos "aspecto privado" en el análisis de la encuesta. La diferencia es que en el aspecto "privado" las metáforas de la religión son difícilmente expulsables porque el discurso revolucionario nicaragüense jamás le concedió mucha importancia a este ámbito, a excepción de un discurso feminista de bajo impacto.

II. LOS RESULTADOS DE LA ENCUESTA.

La cosmovisión de los jóvenes planteada inicialmente en el diseño de la investigación, la habíamos concebido en tres dimensiones y en dos tipos de actitudes: decíamos que podían ser tradicional, moderno y post-moderno; y, en términos de actitudes: de indiferencia y de idealismo de cualquier signo.

La cosmovisión tradicional la definimmos como aquel conjunto de valores y prácticas de los jóvenes que apuntan a defender el statu quo existente, oponiéndose a modificarlo. Asumen los valores proporcionados por las generaciones precedentes, teniendo en ello un énfasis significativo los principios religiosos de las jerarquías eclesiásticas.

La cosmovisión moderna es contraria a la tradicional; lo moderno constituye aquel conjunto de valores y prácticas juveniles que fruto del desarrollo científico y racionalista cuestionan el orden establecido ya sea en los aspectos religiosos, morales, económicos y políticos. Creen en el cambio como método para progresar.

Por último, la cosmovisión post-moderna, a pesar de que existen muchas corrientes, aquí la asumiremos como aquel conjunto de valores donde reinan las formas y el consumo pero también cierta indiferencia frente a los grandes relatos o, en el mejor de los casos, la equivalencia entre ellos. Se manifiesta como el imperio de lo trivial, divertido, efímero, plural e intrascendente por oposición a lo comprometido, grave, fundamental, prometeico y transcendente. La divisa que puede resumir la centralidad de este concepto es: todo vale pero nada dura. Expresa en términos sociales un marcado individualismo que busca su triunfo a toda costa, entendiendo este que puede encontrar su valor en el intercambio con otras mercancías. Es un fenómeno juvenil de corte urbano.

En cuanto a actitudes: la Indiferente es aquel conjunto de actitudes juveniles que implican una falta de compromiso con los problemas sociales, económicos y políticos de la sociedad. Esta actitud tiene ciertas manifestaciones de amoralidad. Y la idealista es un núcleo de actitudes altamente dinámicas, independientemente de los signos, que promueven compromisos y acciones prácticas alrededor de paradigmas políticos o religiosos. Persiguen asumir papeles protagonistas en el ordenamiento de la sociedad. Usualmente constituyen bases sociales de los partidos políticos y de las religiones.

En encuestas anteriores a esta, ejecutadas por Mc Cann Erikson, la mayoría de los jóvenes resultaron ser tradicionales e indiferentes (o escépticos como le llamó la Mc Cann Erikson). Nuestra encuesta no estuvo, en este terreno, muy alejada de los resultados de tales estudios.

Para facilitar la comprensión de nuestros resultados, dividimos en dos grandes ámbitos esta parte de la encuesta: una parte denominada "aspecto público" y otra llamada "aspecto privado". Cada uno con un subconjuntos de variables subordinadas. Apelamos a una estratificación de este tipo que devino aleccionadora porque además de englobar en dos tantos las partes frente a las cuales prometimos enfrentarnos en el diseño, nos permite conocer la cosmovisión de los jóvenes en dos escenarios usualmente separados por los grandes relatos revolucionarios y/o religiosos donde los grandes fines sociales subordinan las pautas de la vida privada. A cualquier observador externo le podría parecer que las incongruencias entre una y otra se debería a insuficiencias objetivas del discurso público o a inconsecuencias del actor que no refleja adecuadamente sus deberes en el "aspecto privado". No obstante, un tercer escenario lo podría configurar aquella noción emparentada con las corrientes feministas que juzgan a la vida privada con una racionalidad propia y le asignan una valor relativamente autónomo.

Sea como fuere, lo cierto es que el "aspecto público" es aquel escenario de los grandes cambios, de las grandes discusiones, de las aspiraciones colectivas, de los asuntos políticos, de los grandes proyectos socioeconómicos, del Estado, en fin, el sitio donde el hombre domina y busca ser el héroe bajo lógicas del éxito. En cambio, "el aspecto privado" es aquel escenario donde, además de un ser el campo visible de la opresión genérica de la mujer, privan las aspiraciones personales, la valoración acerca de los adultos y la familia con sus funciones básicas y rupturas como el matrimonio, el divorcio y el aborto. Que un campo sea más importante que otro, nos parece que obedece en mucha medida a lo que se denomina el "espíritu de la época". Noción en verdad ambigua pero que nos puede orientar acerca del cambio de acentos que han experimentado los campos. Una buena parte de la juventud nicaragüense, sin duda el rango más alto, vivió una época epopéyica con todas las arbitrariedades que usualmente genera este tipo de relatos. El rango más bajo, por el contrario, está ¿disfrutando? otro espíritu donde lo "privado" es dominante. Y lo privado supone, además de la carencia de discursos emotivos de gran aliento, el atractivo de un conjunto de mecanismos que hagan confortable ese espacio, mecanismos que, para el caso de la clase media, lo juegan la electrónica y las redefiniciones del papel del joven y del niño dentro de la familia, lo que en una palabra llamamos "refamiliarización".

En cuanto a la encuesta en sí misma, partimos de un punto en el que nos encontramos con que los jóvenes, al momento de la encuesta, prácticamente votaron casi por igual en 1990 (alrededor del 20%) a favor del FSLN y de la UNO, aunque la mayoría no votó porque no quiso o porque no tenían la edad necesaria en el momento de la votación.

Como resumen general de la encuesta sobre cosmovisión, podemos decir que en el aspecto público (espacio donde privan, como ha sido dicho, cosmovisiones sobre el poder, los proyectos, las preferencias políticas, la valoración de las ideas, etc) inferimos globalmente que el joven tiene una cosmovision ligeramente optimista (son modernos, quieren luchar, creen que la situación mejorará, no hablan muy mal de los revolucionarios, etc) aunque en algunos casos, como en el antimperialismo, ya no poseen la misma fuerza que hace algunos años o, en lo que respecta a la actividad política, no les llama la atención, al parecer si tales actividades están, imaginamos, vinculadas a partidos (son en este sentido post-modernos e indiferentes).

En el aspecto privado (espacio donde privan, como dijimos, cosmovisiones sobre la familia, aspiraciones y paradigmas personales) podemos decir que los jóvenes en general tienen una cosmovisión altamente conservadora. Es decir, son tradicionales y probablemente idealistas de signo conservador. Buscan casarse formalmente, mientras se profesionalizan, con una virgen para tener no más de tres hijos. LLama la atención que no hay paradigmas personales; al parecer, están a la búsqueda de tales modelos. Significa que hay un vacío que puede ser llenado a la larga con paradigmas religiosos o con personalidades locales de proyección comunal o líderes del grupo interesado.

I. ASPECTO PUBLICO

I.1 ¿POR QUIEN VOTO UD. EN LAS ELECCIONES DE 1990

1. FSLN 20.2%

2. No voté 28.7%

3. No tenía edad para votar 24.3%

4. No quiso responder. 6.0%

5. UNO 18.9%

6. Otros 1.9%

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TOTAL 100.0

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Como se observa en este cuadro, los jóvenes votaron, en las elecciones de 1990, casi por igual para cada uno de los grandes organismos políticos del país: la UNO y el FSLN. Podemos decir que prácticamente la encuesta "arranca" en términos simétricos en lo que respecta a las preferencias partidarias de los jóvenes que votaron. Sin embargo, más de la mitad no votaron porque no quisieron o porque no podían, de tal manera, pues, que esta encuesta contiene también respuesta de mucha gente sin experiencia ni inclinaciones políticas específicas. El fenómeno nos brinda la ventaja de ponderar las respuestas de este sector como rápidamente mudable por los acontecimientos políticos y como un verdadero "bolsón" de fuerzas juveniles decisorias en la venidera campaña electoral de 1996.

I.2 ¿UD. CREE QUE VALE LA PENA LUCHAR PARA CAMBIAR LAS SITUACION ACTUAL?

1. No respondió 4.1%

2. Si 87.9%

3. No 6.0%

4. Lo duda 2.9%

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TOTAL 100.00

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Este "sí" mayoritario confirma la vieja idea de que la juventud por principio es transformadora de cara a un "deber ser" inevitable. De alguna manera confirma también una buena parte de las reflexiones presentadas globalmente en el encabezamiento de este apartado. ¿Vale la pena realmente luchar en medio de la decadencia de las promesas de redención en todo el mundo? Sin duda que sí. En el joven es probable que esté funcionando la "astucia de la religión" y sus ansias de probar una vez más, como le ha sucedido a los jóvenes revolucionarios, su "primera vez". No hay detrás de esta afirmación ninguna recompensa más que la de la conciencia del deber y un anhelo justiciero. Pero quisimos saber si, al cruzar los resultados por partidos políticos, los militantes o simpatizantes de causas partidarias tenían mayor porcentaje que los que no tienen ninguna preferencia. Veamos.

I.2.1 ¿UD CREE QUE VALE LA PENA LUCHAR PARA CAMBIAR LA

SITUACION ACTUAL?

│NO RESP. SI NO LO DUDA . Total

PARTIDO ────────┼──────────────────────────────────────────

Ninguno 2.7 86.7 6.9 3.7 100.0

No Respondio 8.9 76.7 8.9 5.4 100.0

FSLN 1.0 95.6 2.0 1.3 100.0

UNO 2.5 90.5 6.0 1.0 100.0

Otros 89.8 8.5 1.7 100.0

Total 3.2 88.0 6.0 2.8 100.0

En efecto, los simpatizantes de causas políticas tienen mayor puntaje para luchar por cambios de la situación actual. De hecho el porcentaje más bajo (al mismo tiempo los que más dudaron) es de los apolíticos y de los que escondieron su preferencia. Uno tendería a pensar con este resultado a la vista que los jóvenes simpatizantes de la UNO, por su signo conservador, presentarían un puntaje muy bajo para "cambiar" una situación donde el sentido común dicta que han triunfado y que, al revés, están obligados a defender el "statu quo". No fue así y, quizás, porque el joven siempre separa su valor último, ese "deber ser", de sus opciones partidarias. Aún para el mismo FSLN, que podría el día de mañana cabalgar sobre esta ilusión para futuras campañas electorales, no es ninguna garantía que los jóvenes no se le separen cuando el FSLN se encargue de hablar de estabilidad y mantenimiento del orden de cosas. Asimismo, hay que entender que el joven está hablando aquí en su código favorito, en el de sus propiedades inherentes contra viento y marea, en la lógica del cambio, y lo más probable es que haya descargado su imagen en los recipientes más parecidos.

I.3. ¿QUE OPINION LE MERECEN LAS PERSONAS CON IDEAS REVOLUCIONARIAS?

1. No respondió 29.5%

2. Luchadores 31.1%

3. Progresistas 13.4%

4. Confundidos 6.4%

5. Oportunistas 6.5%

6. Perdedores 2.1%

7. Tienen su propia ideología 1.4%

8. Se les debe respetar 2.1%

9. Son fanáticos 0.7%

10. Otros 6.9%

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TOTAL 100.00

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Una buena parte de los jóvenes percibe aún como luchadores y progresistas a los revolucionarios, aunque casi un tercio no supo responder y esto llama la atención porque acusa una manera de evitar juicios sobre asuntos que a los ojos de la juventud siempre habían sido sencillos. A esta porción de jóvenes probablemente no les interese calificar a los revolucionarios porque no los procesa su escala de valores y definitivamente no tienen lugar en su universo ni como amigos ni como enemigos. Creemos que es un término medio, porque realmente es despreciable la cantidad de jóvenes que se expresaron mal de los revolucionarios, aún en categorías esperablemente altas como "perdedores" y "confundidos". En esta última parte, las hipótesis de nuestro diseño fracasaron porque sobreenfatizamos el papel de la conciencia postmoderna en la juventud (a lo mejor asignable a esos jóvenes que no dijeron nada) y sobredimensionamos las categorías negativas a la luz de una lógica del éxito invertida, es decir, usamos la lógica típicamente anglosajona de valorar a las personas al amparo de sus éxitos o sus fracasos en todo tipo de ámbito. En la juventud funciona algo por encima de la evidencia y es la fe, la confianza en los grandes fines que son capaces de absolver los pecados menores y salvar a los hombres portadores de tales metas. Se necesita algo más que la derrota de un puñado de revoluciones para quebrar la esperanza sobre las bondades de una sociedad mejor, preparada por un conjunto de cambios espectaculares.

I.4 ¿CUAL ES EL PARTIDO POLITICO DE SU PREFERENCIA ACTUALMENTE?

1. Ninguno 36.4%

2. No quiso responder 17.0%

3. FSLN 24.9%

4. UNO 18.3%

6. Otros 3.4%

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TOTAL 100.00

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El partido "ninguno", como es natural en estos casos, gana siempre. Lo que puede significar varias cosas. Por deducción simple se puede inferir que hay un escepticismo amplio en la juventud, no existe dominio claro de una opción partidaria. Por otro lado, el rango de edad más escéptico es el menor (de 15 a 19), como lo indican nuestros cruces, probablemente por ser testigos frescos de la derrota del FSLN y sus posteriores consecuencias. Así, este rango estaría a la espera de probar suerte por primera vez en circunstancias electorales con algún partido o, dependiendo de la coyuntura política, de decidirse por simpatizar o abrazar a partidos que figuren como protagónicos frente a un suceso crucial para la juventud o la sociedad en general. De todas maneras, estas cosas no se pueden saber y es imposible que una encuesta capture esta evolución; lo que sí hay que señalar es que esta porción de jóvenes puede ser decisoria para ampliar o reducir la base de quienes, por lo demás, han decidido optar por una preferancia partidaria. Ya propiamente en el terreno de los que simpatizan con alguno, está el FSLN en primer lugar (con casi 25%) y la UNO en segundo (con más de 18%). Ningún partido político fuera de estos dos tiene peso relevante para competir.

I.5 ¿REALIZA ALGUN TIPO DE ACTIVIDAD POLITICA?

1. Sí 5.8%

2. No 92.6%

3. No quiso responder 1.6%

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TOTAL 100.0

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I.6 ¿PORQUE?

1. No le gusta/no le interesa 49.5%

2. No quiso responder 17.8%

3. No tiene tiempo 9.8%

4. No hay organizaciones 4.2%

5. Por desconocimiento político 1.8%

6. Le gusta 3.6%

7. No la dejan 1.0%

8. Otros 12.3%

------------------------------------------

TOTAL 100.0

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Es sorprendentemente alta la desactivación política de la juventud nicaragüense. La actividad política no le llama la atención a los jóvenes. A casi la mitad no le gusta ni le interesa y menos de un 5% dice que no se activa porque no hay organizaciones. La mitad es escéptica en cuanto a realizar algún tipo de actividades políticas porque no le gusta o no le interesa. Pero "gustar" e "interesar" son dos estados de preferencia anímica y material perfectamente modificables en distintas direcciones. Es interesante el dato porque, hasta donde venimos desarrollando el análisis, en la juventud anida aún un espíritu que no podemos calificar de derrotado pero que, sin embargo, no se arriesgan a realizar tareas políticas. De seguro es un compás de espera que no sabemos qué dirección tomará cuando se descongele.

I.7 PARA UD. ¿CUAL ES EL PRINCIPAL PROBLEMA POLITICO DE NICARAGUA?

1. No hay entendimiento 16.0%

2. Las huelgas 4.4%

3. Los sandinistas 3.0%

4. Los recontras y recompas 7.0%

5. Las políticas del gobierno 5.9%

6. La crisis económica 44.6%

7. El sector recalcitrante de la UNO 1.5%

8. Desempleo 1.8%

9. No sabe/no respondió 12.8%

10. Otros 3.1%

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TOTAL 100.0

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La crisis económica y la falta de entendimiento son los principales problemas políticos para los jóvenes en Nicaragua. Los actores políticos (sandinistas, "revueltos" y radicales UNO) no son tomados como altos responsables de la situación. Estas respuestas, esperables en cuanto a la crisis económica que atravesamos, son sorprendentes en lo tocante a la opción mayoritaria que le sigue y a aquellas opciones en que esperábamos con altos índices que descargaran su distribución de culpas. Sorprendente en el caso de "no hay entendimiento" por la sensibilidad que encierra y la despolarización que supone. Congruentes con esta lectura, los jóvenes nicaragüenses no contribuyen a la polarización del país, con la baja dispensa que le ofrecen a los actores políticos, generalmente chivos recíprocos fáciles para expiar los males del país y señalarse mutuamente como villanos en un círculo vicioso.

I.8 ¿COMO CREE UD. QUE VA A EVOLUCIONAR LA SITUACION EN NICARAGUA

1. Va a mejorar 36.5%

2. Va a empeorar 23.7%

3. Seguirá igual 28.2%

4. No sabe/no respondió 11.5%

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TOTAL 100.0

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Indudablemente hay un moderado porcentaje sobre el optimismo en la juventud nicaragüense. Los pesimistas están por debajo incluso de los que aseguran que la situación seguirá igual. Esta pregunta la elegimos como clave para precisar la cosmovisión de los jóvenes de cara al futuro del país. De hecho uno de los grandes resultados que anunciamos en el resumen general de los datos arrojados por esta parte de la encuesta lo combinamos con el aspecto público y terminamos por concluir que hay un optimismo moderado. Pero, como vimos en la parte de la actividad política que a casi la mitad de los jóvenes no les gusta o no les interesa, debemos interrogarnos cómo pueden participar ellos activamente en ese futuro si no les llama la atención la actividad política. Y cómo, sobre todo, sin ellos, puede haber un desenlace favorable. Entonces asumimos que la religión debe jugar un papel central. Ante tal situación decidimos presentar este cruce con las opciones religiosas.

I.8.1 ¿COMO CREE UD. QUE VA A EVOLUCIONAR LA SITUACION EN NICARAGUA?

│NS/NR MEJORAR EMPEORAR IGUAL Total

RELIGION ────────┼───────────────────────────────────────────────

No respondió 33.3 66.7 100.0

Católica 10.8 34.9 23.3 30.8 100.0

Protestante 12.6 44.5 21.8 21.0 100.0

Morava 50.0 50.0 100.0

Ateo 10.0 60.0 30.0 100.0

Ninguno 16.3 45.5 27.3 10.9 100.0

No sabe 38.5 15.4 7.7 38.5 100.0

Testigo de jehov 23.1 30.8 38.5 7.7 100.0

Otras 5.0 55.0 30.0 10.0 100.0

Total 11.6 36.4 23.6 28.3 100.0

En términos de religión, los católicos son los menos optimistas de todos los jóvenes. Significa que no está en manos de los católicos la parte más sustantiva del proyecto optimista. En todo caso, los protestantes, los moravos y los que simpatizan con otras religiones, dentro de sí mismas, apuestan a que las cosas de seguro mejorarán, al menos más de lo que piensan los católicos. Por el contrario, como es esperable, los ateos son los más pesimistas con seguridad por los juicios racionalistas de no esperar nada de la providencia y creer en las fuerzas inmanentes de la sociedad.

I.9. ¿UD. COMO JOVEN SE CONSIDERA ANTIIMPERIALISTA?

1. Sí 29.2%

2. No 54.7%

3. No sabe/No respondió 16.1%

-------------------------------------------

TOTAL 100.0

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I.9.1 ¿UD. COMO JOVEN SE CONSIDERA ANTIIMPERIALISTA?

│NS/N RESP SI NO Total

PARTIDO ────────┼────────────────────────────────────

Ninguno 15.3 22.9 61.7 100.0

No Respondio 27.2 16.8 55.9 100.0

FSLN 12.8 49.5 37.7 100.0

UNO 14.1 24.6 61.3 100.0

Otros 8.5 28.8 62.7 100.0

Total 16.2 29.1 54.7 100.0

Más de la mitad de los jóvenes no se consideran antimperialistas. La sola referencia a tal resultado nos debe hacer reflexionar por la ruptura que supone una respuesta mayoritaria semejante. Es probable que "antimperialista" sea un concepto muy ambiguo o muy sesgado a oídos de un joven. Digamos que puede arrastrar sentidos ocultos por toda la carga sobrepolitizada que lleva. Si antimperialismo significó para ellos establecer una identidad con los EEUU es probable que los jóvenes no hayan separado las dos nociones. Con todo, lo cierto es que no haciendo más que un cruce con las preferencias políticas podemos aproximarnos un poco más a algunas certezas. Así, pues, en el cruce en términos de preferencias partidarias, el sandinista resultó ser por mucho más antimperialista que el de la UNO y si nuestra idea es cierta, de aquí se desprende que haya un signo de igualdad entre este adjetivo político y una nación específica. Más aún, el que no tiene preferencias, es quien no se considera antimperialista en mayor medida.

I.10 SI A UD. LE DIERAN A ESCOGER ENTRE ESTAS OPCIONES, ¿CUAL ESGOGERIA (leer las cuatro primeras opciones)?

1. Resolver problemas juveniles 22.0%

2. Divertirse plenamente 5.7%

3. Ayudar a sus semejantes 59.8%

4. Acumular dinero 9.1%

5. No sabe/no respondió 3.4%

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TOTAL 100.0

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I.10.1 SI A UD. LE DIERAN A ESCOGER ENTRE ESTAS OPCIONES, ¿CUAL ESGOGERIA (leer las cuatro primeras opciones)?

NO RES- RESOLVER DIVER- ACUMULAR AYUDAR A

│PONDE PROBLEMAS TIRSE DINERO SEMEJANTES NO SABE Total

RELIGION ────────┼──────────────────────────────────────────────────────

No respondió 33.3 66.7 100.0

Católica .2 21.9 5.4 8.8 60.9 2.8 100.0

Protestante 22.7 6.7 10.9 56.3 3.4 100.0

Morava 25.0 25.0 50.0 100.0

Ateo 50.0 20.0 30.0 100.0

Ninguno 16.4 7.3 12.7 60.0 3.6 100.0

No sabe 15.4 7.7 15.4 38.5 23.1 100.0

Testigo de jehov 23.1 7.7 69.2 100.0

Otras 15.0 85.0 100.0

Total .3 21.9 5.6 9.1 60.0 3.2 100.0

La mayoría de los jóvenes tienen una vocación por ayudar a sus semejantes y resolver problemas. Como el fenómeno puede estar influido por nociones religiosas, por lo menos en lo que se refiere a la ayuda a los semejantes, se puede ver en el cruce que hicimos que los católicos están más a favor de este concepto que los protestantes, pero menos que los testigos de Jehová. "Ayudar a los semejantes" también puede tener una connotación seglar y no sería nada extraño que en las respuestas, los muchachos se estén refiriendo a los seres humanos como "fines en sí mismos", un poco como el deber ser kantiano parecido, en efecto, a los deberes de las religiones pero también, por otro lado, a los propios principios motrices de la juventud en general, tal como lo señalamos en nuestra introducción. Los ateos están, por el contrario, más por resolver problemas que por asuntos de caridad o de nobleza. En sentido general aquí funciona también lo que dimos en llamar "astucia de la religión". Para los ateos, en general, obviamente que con respecto a la opción de "ayuda", resolver problemas tiene una carga participativa que quizás no la tengan los católicos si como tales no incluimos una variante muy pequeña de comunidades simpatizantes de la Teología de la Liberación. Es decir, que los ateos puede que estén creyendo que la resolución de los problemas juveniles no puede hacerse sola y que ellos tienen mucho para contribuir. Por último, es muy significativo que las opciones, digamos menos "idealistas" (divertirse y acumular dinero), no tienen gran cabida dentro del abanico leído al auditorio juvenil. Muy significativo decimos porque si convenimos en presentar el postmodernismo, definido en los términos expuestos en nuestro diseño, como dominante, lo cierto es que estos resultados nos desmienten, al menos en lo tocante de estas preferencias. Sin duda, los muchachos nicaragüenses siguen teniendo una gran corazón.


II. ASPECTO PRIVADO.

El joven en el aspecto privado tiene una cosmovisión bastante conservadora. En cuanto a la familia, más de la mitad creen en la virginidad, del mismo modo que en parecido porcentaje conciben al matrimonio como necesario y base de la familia y no aspiran a más de tres hijos. Un poco menos de la mitad cree que el divorcio es malo. Pero donde hay una dominancia casi absoluta de rechazo es en el aborto, que lo consideran como crimen y pecado. (Véanse los cuadros respectivos).

II.1 ¿UD. CREE QUE LA MUJER DEBE LLEGAR VIRGEN AL MATRIMONIO?

1. No respondió 7.6%

2. Sí 56.9%

3. No 35.5%

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TOTAL 100.00

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Una de los indicadores básicos para atrevernos a decir que hay una cosmovisión conservadora en los jóvenes, es precisamente la creencia en la virginidad en el matrimonio. Independientemente de si los muchachos creen más o menos que las muchachas en el asunto, lo que interesa saber es que tal fenómeno colateralmente supone otros, generalmente conexos con el mantenimiento de un orden opresivo para las mujeres. En especial, del sentido de propiedad que los machos tienen sobre las mujeres se desprenden una serie de "derechos" asumidos como "naturales", entre ellos, golpearlas, prohibirles trabajar, salir, divertirse, planificar, etc, etc. En su sitio esto será abordado con más profundidad. Por lo pronto, lo que interesa saber es que este principio, sostenido por más de la mitad de la juventud nicaragüense, es uno de los pilares básicos de programas políticos conservadores muy estrechamente vinculados a la religión.

II.2 ¿QUE OPINA DEL DIVORCIO (leer las dos primeras opciones)?

1. No respondió 9.7%

2. Bueno 44.6%

3. Malo 45.8%

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TOTAL 100.00

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No hay una abierta inclinación de los jóvenes en cuanto al divorcio. Lo creen tan bueno como malo. La imagen que podemos inferir es que la mayor parte de la juventud en Nicaragua no es casada legalmente y la situación nos permite concluir que el divorcio no es un asunto de principio, de vida o muerte en la cosmovisión valorativa de los jóvenes. Tradicionalmente el divorcio es un "después" del matrimonio, algo en verdad muy difícil para ser repetido dos veces en una edad tan temprana y tener juicios "duros" alrededor de un desenlace como éste. La diferencia del matrimonio es que, a pesar de no ser realizado por una buena parte de los que respondieron, evalúa ilusiones, cosa que no puede hacer un juicio sobre algo que está terminándose.

II.3 ¿QUE OPINA SOBRE EL ABORTO?

1. No respondió 6.0%

2. Es un crimen 51.3%

3. Es un derecho 3.4%

4. Es necesario 5.6%

5. Es pecado 26.4%

6. Es malo 4.2%

7. No se debe hacer 0.9%

8. Otros 2.3%

----------------------------------------

TOTAL 100.00

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II.3.1 ¿QUE OPINA SOBRE EL ABORTO?

│NS/N RES CRIMEN DERECHO NECESARIO PECADO MALO NO DEBE OTROS Total

RELIGION ────────┼─────────────────────────────────────────────────────────────────────────

No respondió 33.3 66.7 100.0

Católica 6.0 51.6 3.6 5.6 26.0 3.9 .9 2.3 100.0

Protestante 3.4 51.3 3.4 37.0 2.5 .8 1.7 100.0

Morava 25.0 75.0 100.0

Ateo 10.0 70.0 10.0 10.0 100.0

Ninguno 5.5 50.9 5.5 10.9 9.1 14.5 3.6 100.0

No sabe 30.8 38.5 7.7 23.1 100.0

Testigo de jehov 30.8 7.7 38.5 7.7 7.7 7.7 100.0

Otras 50.0 5.0 5.0 40.0 100.0

Total 6.0 51.2 3.4 5.5 26.7 4.1 .9 2.3 100.0

Como se puede apreciar en este cruce, en términos religiosos no hay mucha diferencia sobre la valoración del aborto como un crimen por parte de católicos y protestantes. No debe sorprender que los católicos, aunque sea en un porcentaje casi despreciable, consideren el aborto como un derecho. Es de seguro la influencia de corrientes católicas menos conservadoras. Obsérvese que los ateos son los más altos en defender el aborto como derecho.

II.4 ¿QUE OPINA SOBRE EL MATRIMONIO?

1. No respondió 8.1%

2. Anticuado 6.3%

3. Es necesario 33.3%

4. Aspiración principal del ser humano 12.6%

5. Base de la familia 29.0%

6. Bueno 6.1%

7. Otros 4.7%

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TOTAL 100.00

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Sin duda, el matrimonio sigue presidiendo la noción principal de soporte de la familia sea porque es considerado necesario, sea porque es la base de la familia misma o porque, en fin, es aspiración del ser humano. Esta mentalidad es muy sensible a discursos religiosos, moralistas y conservadores y, en este sentido, un contradiscurso que ignore esta realidad o no le preste la debida importancia puede ser fácilmente estigmatizado.

II.5 ¿CUANTOS HIJOS PRETENDE TENER EN SU VIDA?

1. No respondió 7.6%

2. Uno 9.4%

3. Dos 42.8%

4. Tres 31.3%

5. Los que dios mande 7.4%

6. Ninguno 1.6%

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TOTAL 100.00

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El número de hijos nos puede brindar también una imagen del tipo de cosmovisión que priva en la juventud. Se dice que una pareja tradicional y conservadora debe tener más de tres hijos para asegurar la reproducción de una especie que sirva a su creador divino y se realize en el acto de la procreación. En cambio, una pareja moderna no debe tener más de dos hijos, en especial, si cupiera como ideal, la parejita: un varón y una mujer para reproducir aspiraciones de la pareja según el sexo. Por último, un joven postmoderno pensaría en tener uno o ninguno para impedir las limitaciones que provocan los hijos en el disfrute de sus libertades entendidas como placeres. Hasta donde los datos nos llevan tenemos a una juventud que se mueve en los límites de moderna y conservadora en lo que perpetuación de la especie se refiere.

En otro orden de ideas, los jóvenes no tienen un paradigma de personalidad dominante. Los personajes nacionales e internacionales son muy dispersos para precisar los modelos que aspiran imitar los jóvenes. Además de tener un porcentaje respetable la categoría "ninguno" en ambos ámbitos, la categoría "otros", elevada también, se refiere a multitud de personajes dispersos que no logran mucha frecuencia. Por otra parte, digamos que la imagen que nos arrojó la encuesta es de unos jóvenes algo creyentes en la movilidad de status (la mayoría quiere ser profesional), respetuosos de los adultos (son maestros de la vida y compañeros) y condenan a las personas que toman drogas. (Véanse los cuadros respectivos)

II.6 ¿QUE OPINION LE MERECEN LAS PERSONAS QUE TOMAN DROGAS?

0. No respondió 5.6%

1. Son enfermos 51.3%

2. Confundidos 28.6%

5. Viven su vida 1.5%

6. Se divierten 1.4%

7. Vagos 4.1%

9. Víctimas 1.2%

11. Otros 6.2%

------------------------------------------

TOTAL 100.00

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II.7 ¿CUAL ES SU PRINCIPAL ASPIRACION EN LA VIDA?

1. No respondió 5.6%

2. Ser profesional 59.4%

3. Acumular dinero 5.0%

4. Servir a sus semejantes 6.5%

5. Tener propiedad 5.2%

6. Casarse y tener hijos 5.3%

7. Trabajar 4.7%

8. Otros 8.3%

-----------------------------------------------

TOTAL 100.00

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II.7.1 ¿CUAL ES SU PRINCIPAL ASPIRACION EN LA VIDA?

│SER PRO- ACUMULAR SERVIR A TENER CASARSE TRABA- NS/

│FESIONAL DINERO SEMEJANTES PROPID TENER HIJO JAR NR OTROS Total

PARTIDO ────────┼─────────────────────────────────────────────────────────────────────────────────

Ninguno 59.9 4.6 6.4 4.1 5.5 5.0 5.5 8.9 100.0

No Respondio 49.0 8.4 6.4 8.9 6.4 5.0 11.4 4.5 100.0

FSLN 67.7 3.4 7.4 3.7 3.4 4.7 1.7 8.1 100.0

UNO 55.8 5.0 6.0 5.0 6.5 6.0 5.5 10.1 100.0

Otros 66.1 3.4 5.1 6.8 5.1 1.7 1.7 10.2 100.0

Total 59.6 4.9 6.5 5.1 5.3 5.0 5.4 8.2 100.0

Al parecer, los que prefieren al FSLN como partido, están más preocupados que los que prefirieron a la UNO, por profesionalizarse. Es una tendencia nueva. Tiene que ver con la cosmovisión épica de la década pasada donde la aspiración a profesionalizarse fue vista en gran medida como un obstáculo para desarrollar las grandes tareas públicas de una revolución que no podía darse el lujo de distraer energías en una formación académica tenida por retardataria. Al parecer, hoy los jóvenes no creen que ejecutar las grandes promesas de una revolución pase necesariamente por sacrificar sus aspiraciones individuales. Además es probable que esté obrando la presión del nuevo espíritu neoliberal por competir en un mercado calificado de fuerza de trabajo donde los jóvenes sin grado académico son excluidos.

II.8 ¿CUAL ES SU APRECIACION SOBRE LAS PERSONAS ADULTAS?

1. No respondió 12.8%

2. Anticuados 10.9%

3. Represivos 2.7%

4. Frustrados 1.3%

5. Hipócritas 2.1%

6. Honestos 12.8%

7. Maestros de la vida 36.0%

8. Compañeros 11.0%

9. Buenos amigos 2.4%

10. Respetables 2.4%

11. Otros 5.4%

-----------------------------------------

TOTAL 100.00

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En nuestra introducción hablábamos de los "actores ocultos" pero que siempre gravitan en la cosmovisión juvenil y que era imposible que se desentendieran de ellos. Nos referimos, en este caso, a los adultos, a los que dominan la sociedad y la familia en términos generacionales. Es fácilmente imaginable que una juventud rebelde, moderna, tenga una evaluación negativa de los adultos; una juventud conservadora, una evalución positiva y, por último una postmoderna, un juicio indiferente. Como se observa, los jóvenes en Nicaragua tienen mayoritariamente una valoración respetuosa de los adultos, lo que nos permite inferir que su discurso privado o público puede influir sobre su propia mentalidad.

II.9 ¿CUAL ES EL PERSONAJE NACIONAL QUE UD. ADMIRA MAS?

1. No respondió 6.5%

2. Rubén Darío 7.9%

3. Ninguno 39.4%

4. Daniel Ortega 7.9%

5. Luis Enrique Mejía 5.8%

6. Violeta Barrios de Chamorro 3.4%

7. Cardenal Miguel Obando y Bravo 1.9%

8. Carlos Mejía Godoy 2.3%

9. Otros 24.9%

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TOTAL 100.0

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II.10 ¿CUAL ES EL PERSONAJE INTERNACIONAL QUE ADMIRA MAS?

1. No respondió 7.2%

2. El General 15.9%

3. Ninguno 31.1%

4. Papa Juan Pablo II 1.0%

5. Otros 44.9%

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TOTAL 100.0

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REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

Núñez, O. (1983) Las fuerzas clasistas de la Revolución Popular Sandinista. Ediciones CIERA. Managua.

INEC (1991) Nicaragua: Estimaciones y Proyecciones de Población 1950‑2025 (revisado Septiembre ‑ Diciembre 82). ESDENIC'85 y Registros Electorales (Noviembre 1989). Managua.

Vilas, C. (1984) Perfiles de la revolución sandinista. Editorial Casa de las Américas. La Habana.

Vargas, O. (1991) Análisis de la situación económico social de Nicaragua. UNICEF. Mimeo, Managua.

Burbach, R. (1987) Agenda para el debate latinoamericano. Editorial Vanguardia. Managua.

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